Una de las principales características
que define a la gran mayoría de los traductores profesionales es que somos
tremendamente perfeccionistas. Y sin duda, si existe algo que nos disguste
sobremanera es que resalten nuestros errores. Por ello me gustaría utilizar este
artículo para analizar los más comunes que desde mis inicios como traductor
vengo observando, y tal vez, sirva para ayudar a que los traductores noveles o menos experimentados eviten caer en alguno de estos errores. Espero de todo corazón que os pueda
ayudar.